La gira de Molla Mills pasa por Lalanalú

Molla Mills está de gira por las ciudades más ganchilleras de Europa para promocionar su último libro, Virkkuri 4. Los puntos elegidos son Berlín, Berna, Baden Baden, Madrid, Oslo y ¡Barcelona! Estamos muy contentas de anunciar que muy pronto recibiremos a la reina del crochet contemporáneo en Lalanalú. Molla Mills aterrizará en nuestra tienda-taller el lunes, 9 de octubre, para impartir un workshop muy lalalanlunero.

En tres horas, la indiscutible reina del ganchillo más chic nos enseñará a tejer un portabotellas con puntos en forma de conos de helado. Es uno de los patrones de su ultimo libro de la serie «Virkkuri». Y, como el propio nombre de su autora: mola mil.

La inscripción incluye el patrón traducido al castellano. Así, con los conocimientos adquiridos en el taller, podrás tejer bolsos, estuches, maceteros y todo lo que te dé la lana. Ya están abiertas las inscripciones, así que apúntate pronto porque las plazas son limitadas. El workshop se impartirá en inglés, pero no te preocupes si tienes problemas para entender este idioma porque nosotras haremos de intérpretes. ​

Molla Mills tiene un estilo muy marcado y fácilmente identificable. Reconocerás sus diseños minimalistas en accesorios y objetos decorativos con efectos ópticos y motivos geométricos. ¡No hay Lalanalú que se resista! Si quieres conocer su obra antes de venir al taller, descubrirás que ha publicado cinco libros de ganchillo: la serie «Virkkuri». Sus volúmenes parten de las bases del ganchillo y​ explican patrones paso a paso de todos los niveles, algunos de ellos están dedicados a los hombres tejedores. El primer título publicado en castellano por la editorial Gustavo Gili fue Crochet moderno (Virkkuri 1).

En la tienda online encontrarás, además de la posibilidad de inscribirte en el curso, el libro Crochetterie (Virkkuri 3). Esta obra combina instrucciones básicas y proyectos ilustrados con fotografías paso a paso. Propone 31 patrones, de sus inconfundibles bolsos y alfombras con patrones de tapestry, zapatillas, cojines y muchas sorpresas más.

Para aprender a diseñar tus propios motivos y tejer piezas con letras y frases a lo Molla Mills, te recomendamos Crochet Sketchbook, un cuaderno pensado especialmente para crochetistas con lecciones y cuadrículas para que dejes volar tu imaginación y crees tus patrones lalanaluneros.

Seas de libros, cuadernos o de taller, descubrirás por qué Molla Mills ha llegado a ser la number one. ¡Anímate a lalanalunear con la reina del ganchillo moderno!

Es una oportunidad única para hablar con la reina del ganchillo contemporáneo, mostrarle vuestros progresos ganchilleros y hojear su último libro Crochetterie. También podéis traer vuestro ejemplar de Crochet Moderno para que os lo dedique. Si sois muy fans, daos un capricho lalanalunero y regalaos el Crochet Sketchbook. ¿Que os es imposible venir? Os podéis organizar con vuestro grupo tejeril o comprar el libro online antes del lunes.

Así recibiréis un ejemplar firmado. No es lo mismo, pero mola mil.

Un patrón por mes: una visita al Hotel of Bees

Empezamos el curso con un reto muy lalanalunero. Cada mes, vamos a tejer un patrón y a contaros todos los detalles punto por punto en el blog. Estrenamos la sección con un chal de ganchillo: el Hotel of Bees» de A Spoonful of Yarn. Así que preparad la bolsa de labores. Nos vamos de viaje… a Normandía.

Hice una búsqueda en Ravelry para calentar agujas. En cuanto vi el patrón de «Hotel of Bees», no me pude resistir y lo compré. Fue lo que se llama amor a primera lana. Tenía todo lo que me gusta: mezcla de puntos, paleta de colores y un formato nuevo. Hasta ahora, siempre había tejido chales semicirculares o tipo granny terminados en pico. Así que el patrón suponía un reto en toda regla. Por cinco euritos, ¿Qué más se puede pedir? Pues una historia lalanalunera.

 

Hotel of Bees, de Christina Hadderingh. Vía Ravelry
Hotel of Bees, de Christina Hadderingh. Vía Ravelry

Resulta que diseño del chal está inspirado en el Hotel de Las Abejas, una mansión protagonista del libro La luz que no puedes ver de Anthony Doerr. Como introducción, Christina nos pone la miel en la boca con la historia del caserón. Las palabras parecen dar vida a los puntos y nos sumergen en la atmósfera del relato de tal manera que no sabes si ponerte a leer o a tejer:

(…) hace cinco siglos, fue la casa de un acaudalado corsario que decidió abandonar el saqueo de barcos para estudiar a las abejas que vivían en los pastos a las afueras de Saint-Malo; allí fue donde se dedicó a garabatear cuadernos de notas y a comer miel directamente del panal. Los escudos de los dinteles de las puertas aún conservan abejorros tallados en madera de roble, la fuente cubierta por la hiedra en el patio tiene la forma de una colmena. Los favoritos de Werner son los cinco descoloridos frescos que hay en el techo de las habitaciones más lujosas y en los que abejas del tamaño de niños pequeños flotan sobre un telón de fondo azul; zánganos enormes y perezosos y abejas obreras de alas diáfanas. Sobre una bañera hexagonal, una reina solitaria de casi tres metros se curva a lo largo del techo con ojos múltiples y abdomen dorado. [Fragmento del libro original, publicado por Suma.]

Pero no perdamos el punto. El patrón está en inglés, pero vale la pena hacer un pequeño esfuerzo. Por sólo 5 euros, en Raverly o en la tienda de Etsy de A Spoonful of Yarn, te puedes descargar tres archivos en formato PDF: una versión completa con gráficos; otra para imprimir que incluye el texto y fotografías que explican algunos puntos y, por último, un documento con fotografías paso a paso, links para acceder a vídeos y un FAQ (preguntas frecuentes). Yo solo utilicé la versión para imprimir. Las explicaciones de las piezas que conforman el chal son muy claras y sencillas. Al principio me costó un poco comprender la lógica del diseño. Pero luego pude seguirlo sin ningún problema.

Aunque el patrón original está diseñado en tres colores (amarillo, blanco y gris), preferí tejerlo en dos: gris claro y verde oliva. Elegí ovillos Selba de BC Garn por su composición, 50% lana y 50% algodón orgánicos. La mezcla es perfecta para prendas de entretiempo. Tengo que confesaros que me he enamorado de este hilo. Es muy amoroso, no se abre ni se engancha en la aguja y los puntos tejidos tienen mucha definición.

Los distintos puntos del chal recrean panales, abejas, alas y flores. Los motivos se despliegan por toda la prenda como miel sobre hojuelas. Hotel of Bees utiliza puntos bajos, altos y cadenetas trabajados en combinaciones, creando dos tipos de puntos con texturas y distintas secuencias. Cada sección recrea la decoración del hotel. Empieza por las alas tejidas a punto bajo y alto doble, continúa por su colmena de punto red, sigue con las abejas de punto garbanzo y termina con las flores en punto alto y cadeneta.

Como en mis diseños suelo utilizar los puntos de garbanzo y alto doble para crear texturas (o punto trenza como me gusta llamarlo), me sentí muy cómoda. Sólo hay disminuciones en un lateral para crear la forma de un triángulo rectángulo. La verdad es que no podía parar de tejer. El ganchillo iba solo y disfruté tejiendo a toda lana. Lo terminé en una semana.

Quiero que empiece el otoño ya para ponérmelo. Es un proyecto perfecto para estrenar la temporada y una gran inspiración literaria para viajar en el tiempo. Espero que te animes a tejerlo. Pero, cuidado, cuenta la fábula que a un panal de rica miel, las Lalanalús acudieron…. y dos mil chales tejieron….

 

Un universo de amigurumis lalanaluneros: Lalylaland de Lalylala

¿Te suena el nombre de Lydia Tresselt? Quizá no, pero estoy convencida de que has visto sus amigurumis en las redes sociales. Son de lo más lalanaluneros. Ella es Lalylala, la creadora de Lalylaland: un universo fantástico de ganchillo habitado de personajes tejidos con algodón. Compartimos con ella dos sílabas muy lalanaluneras y, además, la pasión por el ganchillo y la afición a contar historias con hilos.

New year´s eve, vía Lalylala.com

 

Lalylala ha creado un mundo de amigurumis que nos inspiran mucha ternura y nos invitan a tejer y a vivir aventuras fantásticas en Lalylaland. Allí es donde habitan sus dulces criaturas inspiradas en animales, frutas, verduras y seres fantásticos. Una de nuestras preferidas es una sirenita muy lalanalunera que de pequeña soñaba con abrir una tienda de zapatos y diseñar su colección de sandalias. Mici trabaja como socorrista en las playas de Lalylaland. Adora el vintage, es la cantante de una banda de música que hipnotiza a todo aquel que la escucha y, en su tiempo libre, teje medias con redes de pescador para sus amigas. La reconocerás por su tatuaje en el brazo en forma de ancla. Hmmm, esto me recuerda a alguien. También luce un salvavidas de ganchillo totalmente lalanalunero.

 

 

Lalylala también es conocida por sus tríos de amigurumis diseñados para cada estación del año y festividades especiales como Navidad, Pascua y Halloween. Todos son monísimos y es difícil decidirse por uno. Pero hay dos que nos han robado el corazón especialmente: el de verano y el de fin de año.

El primer trío lo componen los amigurumis Pippa, Keanu y Smila: una piña, un helado, y una plancha de surf, que viven en la isla Kawaii, el paraíso de los surferos de Lalylaland. El segundo son Ziggy, Luzie y Chloe: el primer cohete lanzado al espacio que está a punto de volver a Lalylaland, un gatito de la buena suerte que resulta ser un astronauta y reparte buenos deseos por el mundo sideral y una botella de champán a punto de descorchar en una noche muy especial.

 

Mici, Pippa, Keanu, Smila, Ziggy, Luzie y Chloe son sólo algunos de los habitantes de Lalylaland.

Te invitamos a descubrirlos. Algunos de los patrones son gratuitos y Lalylala los comparte por amor a la lana. Todos están traducidos al castellano. Puedes encontrarlos su cuenta Ravelry o en su web, donde también comparte tutoriales, tablas de conversión y trucos de ganchillo en inglés.

Para tejer los amigurumis de Lalylala, te recomendamos el hilo Regata de Rosários 4, es algodón 100 % y existen más de 50 colores para que puedas recrear cada amigurumi y sus accesorios con todo detalle. Los encontrarás en nuestra tienda-taller y en lalanalu.com.

 

 

Te animamos a compartir fotos de tus creaciones para formar parte de “El paseo de la fama de Lalylala”. ¡Manos al ganchillo y al amigurumi!

Trucos lalanaluneros para tejer ganchillo recto y en redondo: cadeneta, punto bajo y anillo mágico

Nuestro blog está imparable. Va a toda lana, especialmente porque inauguramos nueva sección de «Trucos lalanaluneros para tejer». Todo lo que querías saber y, quizá no te atrevías a preguntar, de tu pasión lanera.

Vamos a empezar por el principio, despacito y con buena letra. Así que aquí vamos con los básicos del ganchillo: cómo tejer recto una cadeneta, el punto bajo, en redondo para crear bases ovaladas y con anillo mágico para las circulares. Pero, espera, espera. Antes de lanzarte, toca elegir ganchillo.

Como nos gusta decir en Lalanalú: cada maestrillo tiene su ganchillo. Como sabes, existen de distintos materiales: madera, aluminio, metal, acrílico, bambú, plástico o silicona. El mango puede ser ergonómico, de colores, estampado e incluso llevar un cable para tejer con punto tunecino. Pero no te despistes, lo más importante a la hora de elegir el más adecuado es la abertura y la forma del gancho. Se trata de una decisión muy personal y, antes de volverte loca, te recomiendo que pruebes varios hasta dar con el que te sientas más cómoda.

Para gustos, ganchillos. Yo prefiero los más puntiagudos para hilos finos y los de punta redonda para lanas más gruesas y esponjosas. Me gustan más los de aluminio y metal de medidas pequeñas y los de madera y acrílico de números más grandes. Para decidir el número adecuado para tu labor, puedes guiarte por la etiqueta del hilo con el que vas a tejer. Te recomiendo que experimentes con uno mayor o menor del recomendado para obtener la tensión correcta. Así el punto no te quedará ni muy apretado ni demasiado suelto.

Una vez elegido la mejor herramienta, vamos al punto. Existen varias formas de empezar a tejer ganchillo, pero comenzamos por los clásicos, que son los que se usan con más frecuencia:

Tejer recto con cadeneta

Cadeneta es el nombre del punto utilizado tanto para crear las bases de los proyectos como para los puntos calados. Si nunca has practicado antes, aquí tienes tu primer ejercicio lalanalunero. Se trata de tejer recto y girar la labor al final de cada vuelta.

Con el ganchillo en la mano, haz un nudo corredero. Coge hilo y sácalo. Repite el proceso hasta que obtengas una tira de la longitud que necesites. Salta un punto y teje un punto bajo en cada punto. Después de tejer el último, haz una cadeneta. Gira la labor y repite el proceso hasta obtener la medida deseada.

Truco: Si es necesario, puedes utilizar un ganchillo 0,5 mm mayor del que vayas a usar para el resto de la labor. Es normal que la cadeneta quede más compacta. Para mantener la pieza recta, cuenta los puntos en cada vuelta y asegúrate de no hacer aumentos ni disminuciones.

 

Punto bajo

El punto bajo es el punto básico del ganchillo. Para tejerlo, introduce la aguja en la cadeneta, coge hilo, sácalo, vuelve a coger hilo y saca las dos hebras que tengas en la aguja. Et voilà!

 

 

Tejer en redondo una base ovalada

Si quieres tejer un estuche o un bolso, la mejor forma de empezar es tejer en redondo una base ovalada. Comenzamos con una cadeneta de la longitud deseada. Tejemos dos puntos bajos en el segundo punto de la cadeneta, obteniendo tres puntos en el mismo punto. Seguimos con un punto bajo en cada punto hasta el final de la cadeneta, tejiendo tres puntos bajos en el último punto. Continuamos trabajando un punto bajo en cada punto por la hebra de abajo de la cadeneta. Repite la operación tejiendo en redondo. Cuando obtengas la base de la medida que necesitas, sigue tejiendo en redondo con un punto bajo en cada punto para ganar altura.

Truco: Coloca un marcapuntos en el primer punto de cada vuelta para guiarte y vigila que los aumentos de tres puntos en los extremos estén en la misma posición: el punto del centro.

 

Tejer en redondo con anillo mágico

Para hacer un anillo mágico, coge la hebra con la mano izquierda y da una vuelta en los dedos índice y corazón. Pasa el ganchillo por dentro del aro, toma hilo, sácalo, coge hilo y sácalo otra vez. Ahora teje con el ganchillo 6 puntos bajos alrededor del aro. Una vez tengas los puntos necesarios, estira el hilo para ajustar tu anillo, cerrando el centro. Sigue tejiendo en redondo.

Para hacer una pieza con forma redonda debes seguir la proporción de 6 aumentos por vuelta. Es decir, en la primera vuelta tendrás 6 puntos. En la segunda, tienes que hacer un aumento en cada punto (2 puntos en el mismo punto) para conseguir un total de 12 puntos. En la tercera, teje un punto y un aumento en el siguiente punto hasta obtener 18 puntos por vuelta. En la cuarta, teje 2 puntos y un aumento, hasta obtener un total de 24 puntos. Y así sucesivamente.

 

Truco: Utiliza un marcapuntos en el primer punto de cada vuelta y cuenta cuántos puntos tienes en cada una. Si estás tejiendo una pieza plana, sigue tejiendo con aumentos hasta obtener la medida necesaria. Si se trata de un cesto o bolsito, una vez llegues a la medida de la base deseada, teje un punto bajo en cada punto para ganar altura. Te enseñaremos a hacer disminuciones más adelante.

Ahora que ya conoces los principios lalanaluneros de la técnica del ganchillo, elige tu labor, un ovillo y haz lo que te dé la lana. Próximamente, más trucos en el blog. ¿Ganchillos a punto?

Con Sock de Sóc una Troca!!! Calcetines a toda lana!!!

Toc, toc… Este cielo que oscurece cada vez antes. Estas ganas de sofá. Esta impaciencia por descubrir lanas nuevas. Sí, sí, Lalanalús del mundo. Se acerca la temporada más lalanalunera del año y la vamos a empezar ya mismo con buen pie. Estrenamos lanas de Sóc una Troca!!! Prepara las agujas para lucir calcetines de otoño.

Te vamos a contar la historia que hay detrás de Sóc una Troca!!! (que significa, ‘soy una madeja’). Laia, su creadora, se crió rodeada de mujeres que cosían, bordaban y tejían. Podríamos decir que los hilos corren por sus venas. Hace unos años comenzó a hilar y a teñir a mano. Después de mucho investigar, creó su propia marca de madejas, inspirada en técnicas artesanas y herramientas tradicionales como la rueca y el huso. Todas sus madejas están hiladas y teñidas a mano en su casa de Fatarella (Terra Alta, Cataluña) con tintes ecológicos, libres de metales pesados y contaminantes, respetuosos con el medio ambiente.

Cada una de estas madejas es única. Para iniciar nuestra colaboración lalanalunera, hemos elegido la Sock: una mezcla 75% lana y 25% poliamida, diseñada especialmente para tejer calcetines. Se trata de un hilo muy resistente tanto por su composición como por el grosor de la fibra y el tratamiento “superwash”. Hay que tener en cuenta que los calcetines sufren mucho desgaste a causa del roce y los lavados continuados. Pero Laia ha pensado en todo. Durante el tinte ha distribuido los colores de manera que al tejer obtengas unas secuencias cromáticas determinadas. Y, para no quedarse con un pie dentro y otro fuera, cada madeja de 100 g te da para un par.

 

 

Aviso a Lalanalús: tejer calcetines es igual o más adictivo que tejer chales y cuando empiezas con Sock ya no hay stop. Para iniciarte en el mundo de los calcetines hechos a mano, puedes unirte al proyecto lalanalunero de Laia en Ravelry. Cada mes, elige y teje un patrón a modo de test para las Sock. Así comprueba cuáles son los colores, estampados y puntos más adecuados para cada uno: a rayas, con calados o trenzas. Repasamos patrones y colores mes a mes:

 

Enero: Patrón Kalajoki de Tiina Partanen con Sock print de color rojo para realzar las ondas en relieve de los laterales.

 

Rosa n.10

 

Febrero: Skew de Lana Holde con el color Dark Tulip. Para darle el toque psicodélico, jugó con el contraste del claroscuro de los puntos.

 

 

Fireworks n.4

Marzo: Laia tejió sin patrón, al más puro estilo Lalanalú, free style 100%, con gris y morado. El detalle fue el color del talón.

 

Negro n.1

 

Abril: Probó el color Garden para tejer el Frasier Fir Socks de Verena Cohrs. Una combinación perfecta entre los tonos verdes de la lana y los detalles vegetales del patrón.

 

Garden

 

Mayo: Cadence Socks de Verybusymonkey, con trenzas y calados realzados con el degradado de negro a gris perla.

 

Amarillo n.3

 

Junio: Los calcetines tobilleros Jelly Rolls de Mara Catherine Bryner con colores Capdells de Venus y morado son una propuesta muy lalanalunera.

 

Morado n.4

 

Julio: Monkey Socks de Cookie A, en color verde musgo para un delicado patrón con puntos calados.

 

Verde n.12

 

Agosto: There & Back Again Socks de Dawn Cotton, un divertido patrón bicolor que combina rosa y marrón.

Sigue el proyecto de @socunatroca en Ravelry mes a mes y pásate por la tienda-taller o por nuestra tienda online para descubrir la paleta de colores de las madejas Sock. Si te hace falta ayuda, apúntate a nuestros talleres personalizados. En unas horas, te enseñaremos a tejer calcetines. Tu nueva adicción lalanalunera te espera a la vuelta de la esquina. Empiézala con buen pie.